martes, 23 de septiembre de 2008

Finales de cuento

Particularmente me cabrea bastante este detalle de novela romántica en general... ¿Por qué todos los protagonistas además de ser guapisímos, con nobles sentimientos, altos principios, maravillosos en la cama.... tienen que más encima ser millonarios? ¿qué pasa con el varon promedio? y me refiero a aquellos que nosotras conocemos y deben trabajar duro para llevar el pan a la mesa... O sea, con este tipo de machos es claro que luego lleguemos a nuestras casas -que en comparación con las de los libros son simples chozas- y veamos a nuestros compañeros como "escualidos" y sin gracia...
Obviamente es mucho más entretenido leer de mundos maravillosos y finales felices, pero es asi como alimentamos nuestro pensamiento mágico en el que esperamos algún dia nuestra hada madrina encuentre nuestra dirección que extravió cuando nacimos o nuestro mail más que sea.
Apoyo a spice... estos finales inspiran el hecho de "encontre un marido rico... me he realizado en la vida" o que ilusamente pongamos en las manos de otro nuestra felicidad y que por lo mismo lo culpemos cuando no veamos realizados nuestras fantasias de castillos y carruajes a la puerta.
Debe ser agradable no preocuparse por detalles ecónomicos ni estar pensando en la cuenta ni mucho menos fin de mes. Pero vamos que la realidad es otra y si queremos cosas buenas hay que partirse la espalda.
Intento no alimentar mi pensamiento mágico pero vamos que no es fácil, desde pequeñas nos lavan el cerebro con cuentos donde princesas bellisimas se quedan con príncipes adinerados... eso mismo nos deja la idea que sólo la belleza es necesaria para tener un pasar privilegiado y no necesitamos alimentar las neuronas...y después de todo el maquillaje tiene más probabilidades de atrapar un buen partido que los estudios.
O sea... las que no somos supermodelos pero tenemos una capacidad cerebral envidiable ¿debemos conformarnos con una vida de trabajo?
Bueno... creo que notan el porque estoy desencantada con Romántica en general y mis motivos para solamente seguir leyendo a la hermandad de la daga negra.
No me regodeo con las penas ajenas pero tampoco vivo soñando con el mundo al que no accedí por no casarme con el tipo de la cuenta de banco indicada.

Graciosamente me recuerda la pelicula "Sex and the City" cuando Carrie al finalizar un cuento de hadas con el infaltable Y vivieron felices para siempre, le dice a una pequeña: "Esto NO siempre sucede en la realidad... pensé que deberias saberlo desde ya"